El Bayern de Munich se llevó en la tanda de pénaltis el
sueño de la décima Copa de Europa del madridismo, tras un duelo épico
convertido en Clásico Europeo en el que el conjunto alemán demostró porque es
la "bestia negra" de un Real Madrid, que tras ganar 2-1 con doblete
de Cristiano Ronaldo, acabó llorando por el fallo en los tiros desde los once
pasos del portugués, Kaká y Ramos.
Era la primera vez en la historia del Estadio Santiago
Bernabéu que un partido de la Champions acababa en tanda de penaltis. El
madridismo agarrado a la figura de su santo, "San Casillas", y
desolado cuando las dos paradas de su Capitán, que igualaban la tanda, acabaron
en nada con el disparo a las nubes de Sergio Ramos. En un duelo rebosante de
futbol en el que el Bayern cumplió su sueño: jugar la Final en su estadio, el
Allianz Arena.
Cristiano Ronaldo consiguió los tantos del Madrid en los
primeros minutos de juego, por la vía penal al minuto 6’ tras engañar a Neuer y el segundo al minuto
14’ recibiendo un pase de Mesut Özil que lo dejo frente al arco, cruzando su
disparo que colocaba en ese momento en la Final al cuadro merengue. Pero los
alemanes lograron descontar al 27’, Arjen Robben se encargo de facturar por
penal el empate en el marcador global.
El duelo estaba en el momento en el que sale la casta,
cuando los futbolistas se disfrazan de héroes y quieren protagonismo. Cristiano
debía aparecer y su falta fue a manos de Neuer. Robben se excedía del mismo en
vez de ser generoso. Egoísta por naturaleza se la jugó ante Casillas, que le
sacó el mano a mano con rapidez, como en la Final del Mundial, en vez de
asistir a Mario Gómez, solo. En la máxima tensión, cuando un error te deja
fuera y un acierto te conduce a la gloria, Mario Gómez tuvo en sus pies la
eliminatoria. Por una vez pasó Robben, y el gigantón controló en vez de chutar
y cuando lo hizo salvaron lanzándose a por todo Ramos y Xabi Alonso. Llegaba la
prórroga y sin encontrar ganador quedando como ultima instancia los penales.
Ocurrió lo inesperado. Falló Cristiano, el futbolista que
había marcado todos sus lanzamientos de penal esta temporada. Falló Kaká, más
fuera que dentro del Real Madrid. Casillas levantó a su equipo con sus paradas
a Kroos y Lahm. Cuando todo se igualaba Ramos apostó por la potencia y
Schweinsteiger puso la guinda. El Real Madrid de Mourinho vuelve a quedarse a
puertas de la final tras recuperar el prestigio perdido en Europa. El Bayern
puede ser el primer equipo de la historia que gana la Champions League en su
estadio. El Chelsea le espera. El futbol español, gran favorito, se quedó en la
nada.
EFE, fotos Getty Images.